BIENVENID@S

El CM Bajo Segura invita a toda persona que viva, ame, sienta, cuide y respete la naturaleza, a compartir con nosotros cualquier actividad a realizar. Agradecemos el apoyo recibido por todos nuestros familiares y amigos y aceptamos cualquier sugerencia u opinión. Recomendamos estar en posesión de licencia federativa de la FEMECV.

domingo, 25 de octubre de 2009

Rambla Salada (Sierra de Albatera)

 Sorprendente es quizá el mejor calificativo que se le puede otorgar a esta bellísima ruta de nuestros parajes alicantinos. Este compendio de caprichosas formaciones geológicas mezclado con la curiosidad del nacimiento de agua, que atraviesa una veta mineral de sal, le confiere un peculiar atractivo sólo superado por el obsequio que nos espera al tener que superar distintos desniveles por medio de vías ferratas, sólo apto para intrépidos. Partimos como es habitual desde la caf. El Palmeral en Orihuela y nos dirigimos hacia el lugar donde dejamos los coches.
 Comenzamos la ruta atravesando la obra civil que se realizó en su momento para transportar el agua salada con la hermosa visión de las crestas erosionadas por el viento y su pasado marino. Cabe destacar que la zona es completamente árida excepto por los campos de cítricos que se vislumbran a lo lejos. Llegamos con estupor, por lo menos yo, a la zona del nacimiento, mezcla de rojos arcillosos y blanco de los depósitos salinos, parecía un paisaje nevado a no ser por el sol de justicia y la época del año. Remontamos el barranco por un tortuoso desfiladero hasta la primera parada para almorzar. Se reanuda la marcha con el peso de la mochila trasladado a la panza con la consiguiente pérdida de estabilidad, dirigiéndonos al matadero en forma de vía ferrata para salvar los aproximadamente los 20 mts. de desnivel del inicio de la ruta de las pozas que pone a prueba nuestra resistencia. ¡Espectacular!
 Ya salimos de esta angosta garganta, bastante agotados, y tenemos que remontar un considerable desnivel por una antigua tubería que nos lleva a la que es una de las pocas canteras que existen en el mundo de la que extraen material para hacer las pistas de aterrizaje de los aviones. Volvemos a descender con la compañía del sonido del agua salada que mediante tuberías llega hasta Torrevieja para mezclarse con el agua del mar, en sus salinas. Ya casi llegando al punto de partida observamos con asombro bellas formaciones rocosas en forma de cuchillos o cresta finalizando esta apasionante aventura.
erManu


domingo, 18 de octubre de 2009

Sierra de Orihuela

Una vez decidido el itinerario nos pusimos en marcha, el reducido número de expedicionarios comandados por el general Roberto.
Comenzamos la marcha desde San Cristobal pasando por el futuro "refugio camping o como lo vayan a llamar", en este punto y sin haber andado aún ni 8 minutos empezó la cabesica del general a darles vueltas al asunto de ver quien lo va ha llevar, quien va a trabajar y lo mas impòrtante donde ha ido a parar la money. Empiezan las primeras rampitas y la nueva amiga del grupo, ROSA, mira de reojo ha Maite y se acuerda creo de su familia -¡con que era una vuelta!-. Otro aventurero Miguel ni pestañea y asi llegamos a la fuente de agua donde a pesar de tener el agua cristalina, no hay lo que debe haber, pa echarse un traguito. Y continua la marcha siempre cuesta arriba con unas buenas rampas donde Roberto deja bastante claro que lo suyo es subir. Almorzamos en el corralico, las buenas costumbres se van perdiendo, y la suculenta tortilla de patatas que me suelo llevar es sustituida por un sandwich y fruta, datiles y almendras, todo ello regado por H2O en su estado liquido. Reanudamos la marcha hacía el geodésico de la Sierra la Leja a la que llega Miguel seguido de Nino y del grupo Paco, Sergio, Maite, Rosa y Roberto que velo por la seguridad de esta última.
Después de la típica foto empezó la parte mas "divertida" de la jornada, LA BAJADA, en la que nos descubrieron una nueva técnica:
LA PELOTILLA consistente como su nombre indica en una vez que estas en el suelo hacerte un ovillo y seguir para abajo.....
La amiga Rosa no disfruto mucho de la bajada pero... ya veremos en la próxima. De vez en cuando sonaba algún que otro pum, pum, pum.... y se entonaba la canción de "somos personas no somos conejos" o "la vaca lola, la vaca lola tiene cabeza y cola".
Y así de entretenidos se llegó al punto de partida habiendo coronado los 633m. de la Sierra de Orihuela.
Para remediar el pésimo almuerzo nos bebimos unas cervecillas, acompañadas de mejillonillos, un pulpillo a la gallega...etc. Nino

domingo, 11 de octubre de 2009

Sierra de La Pila

Como es habitual quedamos en el bar El Palmeral en Orihuela. Servidor llegó un poco tarde y nos esperan en La Murada que según palabras de Nino "está pero no está" por lo que como es normal me pasé de largo. Cuando ya tomamos el camino "correcto" parece que hay diversidad de opiniones sobre como llegar y algún que otro vómito por la sinuosidad de la carretera. Finalmente llegamos a La Garapacha desde donde iniciaremos la ascensión en principio dura dado que tenemos que superar un desnivel de 700 mts. El camino seco y pedregoso característico de estas tierras se va entremezclando con el verde de los pinos y carrascas. Conforme vamos ascendiendo las vistas son espectaculares y la pista dura para nuestras piernas. La primera parada para el refrigerio obligado, tras 2 h. de marcha, es en el refugio sito en el pico de Los Cenajos a 1229 mts. que también tiene una caseta de vigilancia forestal. Una vez dada cuenta de nuestros humildes manjares nos dirigimos hacia el pico de La Pila a 1265 mts. En esta cima hay un observatorio meteorológico (eso dicen) con una enorme bola blanca que recuerda a aquellos globos de lámpara que se rompían con solo mirarlos y que siempre te pillabas los dedos con el dichoso muellecito que lo sujetaba, al cambiar la bombilla. Un poco de yuyu si que daba. Podemos observar a tiro de piedra la aldea en la que se encuentran nuestros coches pero tenemos que volver por donde hemos venido. Iniciamos el descenso poniendo a prueba nuestros frenos fisiológicos porque la pendiente se las trae. Tras hora y media de continua bajada y resbalones varios llegamos al principio de esta nueva aventura senderista.






domingo, 4 de octubre de 2009

Barranc del Infern - La catedral del Senderismo - PRV 147

Magnífico día entre colegas, 30 personas más o menos para ser exactos, incluyendo a nuestros amigos murcianos de Asaltamontes y Mivisa-Querkus (de lo mejor que hay o que tenían). Comenzamos la andadura dejándonos el autocar sobre las 8:30h en las afueras de Fleix para saborear un merecido desayuno. Nos ponemos en marcha en dirección al lavadero y la font grossa para comenzar el primer descenso al barranc con la compañía de los sonidos del agua que, aunque no abundante, se agradece su presencia. Atravesamos el forat en dirección al barranc. Las lluvias han extendido un manto verde a las montañas, hace calor con la primera subida. Tras refrescarnos al final  de la primera subida en el pou de la Juvea iniciamos el descenso a la font del Reinós atravesando Les juvees d'Enmig. Nos refrescamos otro poco y descendemos para atravesar por segunda vez el barranc por donde discurre el riu Ebo cuando las condiciones son las adecuadas (vamos lluvia a mares). Aquí si que se notan las recientes lluvias en forma de algún que otro estanque aislado de aguas cristalinas. Continuamos la segunda "subidita" hacia Les Juvees de Dalt acordándonos de la familia de más de uno porque se hace la hora de almorzar y la gente no para, aunque luego se agradece porque con el estómago lleno realizar esta subida, puuuufff. Hacemos la parada de rigor para reponer fuerzas e intercambiar impresiones con la gente. el tramo final se hace largo y pesado, sobre todo por el calor que hace y la humedad. Atravesamos el barranc Racons e iniciamos la dura ascensión zigzagueante que marea a veces. Las rocas nos muestran sus heridas de su pasado glaciar con sus aristas cortantes. Finalmente llegamos al área recreativa de la font del Olbis y de allí hacemos una justa parada para tomar un refrigerio, antes de finalizar la etapa, en Benimaurell, en Les Rogetes. Continuamos en dirección a Fleix con las piernas pesadas por la fatiga acumulada y con la mente puesta en el premio que nos aguarda con la comida de hermandad que hacemos en el Rte. El Cavall Verd. Pero antes pasamos por el lavadero y fuente de Benimaurell y volvemos a pasar por la font grossa y lavadero de Fleix por una camino abundante en agua y en tierras de huerta. Hacemos un último refrigerio en el hogar del pensionista de Fleix, antes de ir en el autocar a comer. Y hasta aquí puedo relatar porque el resto pertenece a nuestro personal recuerdo; no la liamos parda pero casi, tengo la mente en blanco como la paloma ¡Viva San Fransissssscoooooo!