Tras un reconfortante y escaso sueño, recogemos los bártulos y nos ponemos en marcha todavía de noche. El frescor de la mañana va despejando nuestras embotadas cabezas y los sonidos del amanecer acompañan nuestro camino. Tras unos breves pero intensos momentos de tensión en Albudeite algunos desayunan y otros hablamos de la vida y el amor. Proseguimos por la vía verde en dirección a Mula nuestra parada para teóricamente comer que luego será un almuerzo comida generoso. Pasamos por Baños y Puebla de Mula a través de paisajes lunares con tintes de huerta. Asoma en el horizonte el castillo de Mula, ¡que bonito! Ya en Mula nos damos un homenaje, más de lo previsto, en forma de diversos manjares y líquidos hidratantes varios. Intentamos arrancar como podemos, ¡qué remedio!, para proseguir la marcha. El castillo nos hace compañía estos primeros kilómetros. Miramos hacia atrás y parece que se resista a abandonarnos, no adelantamos. ¡Qué pesado se hace el camino!. A Roberto y a mí, que vamos más retrasados que el resto, nos enseña una amable señora un atajo para llegar al santuario de El Niño en el cual esperamos a nuestros compis que nos echan unas amigables miradas de cariño y amor fraterno al vernos deleitar con una jugosa naranja. Atravesamos una serie de túneles y el paisaje se hace más verde por la cantidad de pinos. Luego otra vez el secano, el camino se hace eterno hasta Bullas, los pies doloridos, el camping que no aparece...Está en la otra punta el muy c... ¡Por fin! Parecía que no íbamos a llegar, vaya día, vaya ampollas... Los adelantados nos aguardan en el camping a la espera de decidir para cenar. Duchas, masajes, curas, relajación, etc. Roberto y yo decidimos hacer una cena romántica y los demás suben al restaurante del camping que está a reventar. Cuando terminamos subimos a tomarnos un café y todavía estaban esperando. Nosotros decidimos tirar pa los sacos después de un merecido café y golpe. Al rato aparecen el resto de la peña y la otra peña de senderistas compañeros por una noche con un cachondeoooo... Nosotros todos ya en el saco para dormir y estos dale que te pego a sustancias varias y fiesta. Amablemente Roberto les pide que por favor tengan un poco de consideración porque nos toca levantarnos a las 4:30h. y bueno algo de caso hacen pero casi a la 1 de la madrugada...¡Venganza! claman los cielos, mañana os vais a enterar...
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